Los misterios de Jiménez del Oso (I)
De occulta philosophia
CCLVIII.- Los misterios de Jiménez del Oso (I)
El concepto que tengo del universo me permite creer en civilizaciones similares o superiores a las nuestras en planetas de sistemas solares muy lejanos del nuestro,por lo que nunca he creído que los llamados OVNIS hayan sido los vehículos en los que nos han visitado.Y como el concepto que tengo de nuestro sistema solar me ha obligado a rechazar la ufología,pues hablaba hasta de marcianos,si bien admito que el fenómeno de los OVNIS debió ser estudiado,no me he identificado nunca con los estudios que se han hecho.
Fernando Jiménez del Oso sí se interesó por esa ufología,y lo hizo como periodista de medios audiovisuales,por lo que no rechazo su labor,pues se limitó a viajar y emitir opiniones,sin mucha fantasía.
El libro de Fernando Jiménez del Oso que voy a comentar se llama pues En busca del misterio,y ni hay tanto misterio en algunos de sus capítulos,ni se necesitaban tantas páginas para decir lo que en este libro se dice.He hecho pues un gran esfuerzo para leerlo,y voy a ver si lo resumo y comento.
La isla de Pascua no es isla perdida,aunque esté muy aislada (a 3.518 Km. de la costa americana,y 2.037 de la isla Picairn) y no sea muy extensa,ni esté muy habitada.
Célebre por sus moai,estatuas gigantescas,no las creo de influencia egipcia,pero sí talladas y construidas por hombres.Si son posteriores al siglo XIII no deberían ser tan enigmáticas,pues incluso los actuales habitantes de la isla deberían conocer su significado e historia.Por cuanto ningún artista puede ni tiene por qué tallar dos iguales,los moai a que me refiero representan pues a raa,el sol,que en los siglos a que me refiero podía muy bien ser el dios tradicional de esta isla.Que se hayan hecho,a ese tamaño,estatuas a mujeres u hombres concretos,indica que estas estatuas tenían significado funerario y que,como sucedió en Egipto,y después en Japón,los mandatarios de esa isla debían creerse descendientes del sol.
Sin influencia directa de Egipto,en esta isla se desarrolló pues una civilización y cultura que la recuerda muy de lejos,por lo que los moai son para esta isla lo que las pirámides fueron para Egipto:no tumbas del faraón,pero sí protección o cobertura religiosa de nobles muertos;quienes económicamente pudieron encargaron que sus tumbas estuvieran protegidas por la divinidad en la que creían.
Los moai son colocados sobre piedra cilíndrica y aplastada encima de un muro porque este muro fue,en esos siglos,catedral y cementerio de esta cultura:no para todo el pueblo,pero sí para sus clases dirigentes,y sus familiares.
La influencia de la cultura inca en esta isla es pues factible,pero no creo que fueran los incas (con sus esclavos) quienes construyeran estos monumentos,sino los aborígenes.El imperio incaico pudo muy bien ser conocido en esta isla,y sería imitado,pues indudablemente tendría mucho prestigio.¿Anteriores estos monumentos de la isla de Pascua a los incaicos del Perú?.Si comenzaron a construirse a partir del siglo XIII no lo creo,pero sí puedo admitir que fueran estos monumentos los que influyeron en los peruanos.Por otra parte son muy distintos,pues ya los chinos de la remota antigüedad supieron construir muros y murallas colosales.Para mí se trata pues de una cultura autóctona,pero se dice con razón eso del nihil novum sub sole (nada hay nuevo bajo el sol).La cultura de esta isla no desentonó pues de las de sus vecinos,por mucha distancia que hubiera entre ellos.
Y es verdad que la magnitud de estas estatuas tenga que ver con la frecuencia de movimientos sísmicos.Si un noble encarga esta estatua para inmortalizar su vida,es natural que quiera que no fuese derribada por un temblor de tierra.Y como esos movimientos sísmicos debían ser de baja intensidad,bastaba con que esos monumentos funerarios se construyeran con las dimensiones y técnicas con las que fueron construidos.
No encuentro pues culturalmente aislada esta isla de su entorno,y considero autóctona y original su cultura.Estos monumentos funerarios no deben ser comparados con otros,y deben ser considerados expresión de sus creencias.Felicito pues a Jiménez del Oso,pues al menos no ha visto en estas colosales estatuas influencias de extraterrestres.
En cuanto a los moai kava-kava son también otra expresión de esta cultura,y puedo admitir que sean también expresión religiosa,en este caso fetiches que hacen alusión a esa otra inexistencia cósmica que llamamos demonios.Pues no existen dioses ni demonios religiosos,aunque hayan sido inventos humanos.
El segundo misterio del que se ocupa Jiménez del Oso son las tablillas rongo-rongo,también de la isla de Pascua.Según la tradición,llevadas a la isla por Hotu Matu´a,desde la legendaria isla de Hiva.Están constituidas por pequeñas figuras antropomorfas,peces y signos abstractos grabados con puntas de obsidiana o espinas de pescado sobre madera de toromiro,inicialmente blanda,pero que con el tiempo y la humedad adquieren considerable dureza.Escritas en bustrofedon (al llegar al final de un renglón hay que girar la tablilla 180º,para seguir leyendo el renglón siguiente),de nuevo esta isla no aparece aislada,puesto que este tipo de escritura se dio incluso en la antigüedad de la cuenca mediterránea y Oriente Medio.Datan también del siglo XIII,y efectivamente esta escritura está emparentada con la de la antiquísima cultura del valle del Indo,cuyas dos principales ciudades fueron Mohenho-Daro y Harappa.
No me interesa el mito del unicornio,porque no es más que arte antiguo.Pero Mohenho-Daro y Harappa sí pudieron ser los centros culturales desde los que se irradió la cultura de la isla de Pascua,sin que deje de llamar a la cultura de esta isla autóctona,pues la influencia cultural de Mohenho-Daro llegó a la isla de Pascua desde la desaparecida isla de Hiva,que ya asimiló e hizo propio cuanto llegó desde el valle del Indo.
CCLVIII.- Los misterios de Jiménez del Oso (I)
El concepto que tengo del universo me permite creer en civilizaciones similares o superiores a las nuestras en planetas de sistemas solares muy lejanos del nuestro,por lo que nunca he creído que los llamados OVNIS hayan sido los vehículos en los que nos han visitado.Y como el concepto que tengo de nuestro sistema solar me ha obligado a rechazar la ufología,pues hablaba hasta de marcianos,si bien admito que el fenómeno de los OVNIS debió ser estudiado,no me he identificado nunca con los estudios que se han hecho.
Fernando Jiménez del Oso sí se interesó por esa ufología,y lo hizo como periodista de medios audiovisuales,por lo que no rechazo su labor,pues se limitó a viajar y emitir opiniones,sin mucha fantasía.
El libro de Fernando Jiménez del Oso que voy a comentar se llama pues En busca del misterio,y ni hay tanto misterio en algunos de sus capítulos,ni se necesitaban tantas páginas para decir lo que en este libro se dice.He hecho pues un gran esfuerzo para leerlo,y voy a ver si lo resumo y comento.
La isla de Pascua no es isla perdida,aunque esté muy aislada (a 3.518 Km. de la costa americana,y 2.037 de la isla Picairn) y no sea muy extensa,ni esté muy habitada.
Célebre por sus moai,estatuas gigantescas,no las creo de influencia egipcia,pero sí talladas y construidas por hombres.Si son posteriores al siglo XIII no deberían ser tan enigmáticas,pues incluso los actuales habitantes de la isla deberían conocer su significado e historia.Por cuanto ningún artista puede ni tiene por qué tallar dos iguales,los moai a que me refiero representan pues a raa,el sol,que en los siglos a que me refiero podía muy bien ser el dios tradicional de esta isla.Que se hayan hecho,a ese tamaño,estatuas a mujeres u hombres concretos,indica que estas estatuas tenían significado funerario y que,como sucedió en Egipto,y después en Japón,los mandatarios de esa isla debían creerse descendientes del sol.
Sin influencia directa de Egipto,en esta isla se desarrolló pues una civilización y cultura que la recuerda muy de lejos,por lo que los moai son para esta isla lo que las pirámides fueron para Egipto:no tumbas del faraón,pero sí protección o cobertura religiosa de nobles muertos;quienes económicamente pudieron encargaron que sus tumbas estuvieran protegidas por la divinidad en la que creían.
Los moai son colocados sobre piedra cilíndrica y aplastada encima de un muro porque este muro fue,en esos siglos,catedral y cementerio de esta cultura:no para todo el pueblo,pero sí para sus clases dirigentes,y sus familiares.
La influencia de la cultura inca en esta isla es pues factible,pero no creo que fueran los incas (con sus esclavos) quienes construyeran estos monumentos,sino los aborígenes.El imperio incaico pudo muy bien ser conocido en esta isla,y sería imitado,pues indudablemente tendría mucho prestigio.¿Anteriores estos monumentos de la isla de Pascua a los incaicos del Perú?.Si comenzaron a construirse a partir del siglo XIII no lo creo,pero sí puedo admitir que fueran estos monumentos los que influyeron en los peruanos.Por otra parte son muy distintos,pues ya los chinos de la remota antigüedad supieron construir muros y murallas colosales.Para mí se trata pues de una cultura autóctona,pero se dice con razón eso del nihil novum sub sole (nada hay nuevo bajo el sol).La cultura de esta isla no desentonó pues de las de sus vecinos,por mucha distancia que hubiera entre ellos.
Y es verdad que la magnitud de estas estatuas tenga que ver con la frecuencia de movimientos sísmicos.Si un noble encarga esta estatua para inmortalizar su vida,es natural que quiera que no fuese derribada por un temblor de tierra.Y como esos movimientos sísmicos debían ser de baja intensidad,bastaba con que esos monumentos funerarios se construyeran con las dimensiones y técnicas con las que fueron construidos.
No encuentro pues culturalmente aislada esta isla de su entorno,y considero autóctona y original su cultura.Estos monumentos funerarios no deben ser comparados con otros,y deben ser considerados expresión de sus creencias.Felicito pues a Jiménez del Oso,pues al menos no ha visto en estas colosales estatuas influencias de extraterrestres.
En cuanto a los moai kava-kava son también otra expresión de esta cultura,y puedo admitir que sean también expresión religiosa,en este caso fetiches que hacen alusión a esa otra inexistencia cósmica que llamamos demonios.Pues no existen dioses ni demonios religiosos,aunque hayan sido inventos humanos.
El segundo misterio del que se ocupa Jiménez del Oso son las tablillas rongo-rongo,también de la isla de Pascua.Según la tradición,llevadas a la isla por Hotu Matu´a,desde la legendaria isla de Hiva.Están constituidas por pequeñas figuras antropomorfas,peces y signos abstractos grabados con puntas de obsidiana o espinas de pescado sobre madera de toromiro,inicialmente blanda,pero que con el tiempo y la humedad adquieren considerable dureza.Escritas en bustrofedon (al llegar al final de un renglón hay que girar la tablilla 180º,para seguir leyendo el renglón siguiente),de nuevo esta isla no aparece aislada,puesto que este tipo de escritura se dio incluso en la antigüedad de la cuenca mediterránea y Oriente Medio.Datan también del siglo XIII,y efectivamente esta escritura está emparentada con la de la antiquísima cultura del valle del Indo,cuyas dos principales ciudades fueron Mohenho-Daro y Harappa.
No me interesa el mito del unicornio,porque no es más que arte antiguo.Pero Mohenho-Daro y Harappa sí pudieron ser los centros culturales desde los que se irradió la cultura de la isla de Pascua,sin que deje de llamar a la cultura de esta isla autóctona,pues la influencia cultural de Mohenho-Daro llegó a la isla de Pascua desde la desaparecida isla de Hiva,que ya asimiló e hizo propio cuanto llegó desde el valle del Indo.
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