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La alquimia

De occulta philosophia
XXIV.- La alquimia

La alquimia es,efectamente,antecesora de la química,pero se practicó más como parte de la filosofía hermética,y dede luego no desapareció con el inicio de la química moderna.
La alquimia más importante fue la árabe,pero comenzó a manifestarse en la antigüedad griega,no siendo cierto que Salomón inventara la piedra filosofal.
Los griegos sí practicaron la alquimia,entendida ya como “preparación de plata y oro”,y la llamaron chemeia (química).Intentaron imitar esos dos metales preciosos,o hacer perlas falsas,a partir del cobre o el estaño,utilizando como reactivos el alumbre,el vinagre y la orina:fueron por tanto alquimistas,no químicos,en el sentido que damos a esta ciencia.
Tomaron sus técnicas de los orfebres egipcios,y del pseudo-Demócrito,(Bolo de Mendes),que en el siglo II a.C. hizo a Demócrito autor de cuatro libros sobre las tinturas que permitían esta clase de trabajos.
El primer alquimista digno de este nombre y título,el gnóstico Zósimo,siglo III de nuestra era,describió los aparatos de destilación y sublimación,como el tríbico,alambique de tres balones,en un Libro de la Virtud,modelo para los alquimistas posteriores,aunque cuenta un sueño en el que todos los minerales son identificados como hombres:el chrysanthropos (hombre de oro),el argyranthropos (de plata),etc.La alquimia fue así invención gnóstica,y si tuviésemos los 28 libros perdidos que escribió Zósimo,lo aceptaríamos como inventor de la alquimia,aunque ya antes que él se hicieron aleaciones que imitaban metales preciosos.Zósimo desarrolló pues la crisopeya,“arte sagrado de hacer oro”,y sus contemporáneos Pelagio y Jámblico vincularon a él este arte,aunque ya Olimpiodoro,en el siglo V a.C., cita filósofos presocráticos entre los “hacedores de oro”,añadiendo el emperador Heraclio,Cleopatra (esposa de Ptolomeo),Serapion de Alejandría,Aristóteles y Platón.Se atribuyó así a la alquimia un origen y actividad real,sacerdotal o filosófico,que creo es más bien mítico.
No es cierto por tanto que la alquimia china sea anterior a la griega,aunque Wei PoYang sea anterior a Zósimo:pues su Yiking no hace alusión directa a la alquimia,y hay que esperar al siglo VI para encontrar un alquimista chino,Tao Hong-Jing,comparable a Zósimo.Pues los taoístas,especialistas también en alquimia,evolucionaron más bien hacia una “alquimia interior”,que comprendía más ejercicios espirituales que experimentos químicos.
La alquimia pasó de los griegos a los árabes,y la europea comenzó en el siglo XII d.C.,cuando Roberto de Chartres tradujo al latín Conversación del rey Calid y el filósofo Morien,contada por el esclavo Galip.Morien pudo ser un alquimista romano del siglo XI,que vivió como ermitaño en las montañas sirias,antes de ser llamado a Egipto por el rey Calid.
Los primeros alquimistas europeos debieron conocerla a través de traducciones latinas de textos árabes,que atribuían a autores griegos (Aristeo,Pitágoras y Demócrito) una alquimia no atestiguada,no histórica por tanto.
El primer alquimista europeo algo famoso fue el franciscano Roger Bacon,siglo XIII,que practicó ya la alquimia en su laboratorio de Oxford,por lo que fue desterrado.Pero su Speculum alchimiae habla sin embargo todavía de una alquimia especulativa,por lo que debemos considerar primer texto de alquimia el Practica alchimica,(1358),de Hortulano.Pues en este texto se habla ya del agua fuerte (ácido nítrico).
El segundo texto sería el Liber lucis (Libro de la luz) del franciscano Jean de Roquetaillade,Rupescisa de apodo,en el que describe su horno alquímico,y el Liber de consideratione quintesenciae (Libro sobre la quintaesencia),en el que describe cómo transformó cien partes de mercurio en oro y plata.Como la creencia general es que jamás alquimista alguno transformó metal alguno en oro o plata,en metales preciosos,una cosa es lo que dicen los libros,y otra su veracidad histórica.
Desde finales del siglo XIV los alquimistas sufrieron persecuciones,sobre todo en Francia,Inglaterra e Italia,si bien Enrique VI de Inglaterra,en 1436,quiso reponer el tesoro público acudiendo a alquimistas,para que le fabricaran oro.
Bernardo de Treviso,nacido en 1406 en Padua,escribió dos tratados de alquimia,el principal de los cuales,Grandísimo secreto de los filósofos,fue publicado en 1567.
La difusión de la alquimia tuvo pues lugar durante los siglos XVI y XVII,cuando ya fue apoyada y protegida por emperadores como Rodolfo II y Federico III.
Ya sabemos que el intento de la alquimia fue transformar metales imperfectos (hierro,plomo,estaño o cobre) en perfectos (oro o plata).Consideraban pues constituido el oro por una gran parte de mercurio purísimo,y otra pequeña parte de azufre,purísimo también.Por lógica quisieron transformar pues el mercurio y azufre en oro,pues creían también,por influencia de Basileus Valentinus,que los metales tenían sexo,y por tanto capacidad de engendrar.
Los alquimistas fueron perseguidos por la Inquisición porque rezaban antes de iniciar su trabajo,ya que su divisa fue Lege,lege,relege,ora,labora et invenies (Lee,lee,relee,reza,trabaja y encontrarás).Pero la Iglesia sospechaba que tenían la intención y ambición de igualarse a Dios,por lo de creadores,ya que aspiraban a encontrar un elixir de larga vida,y porque llamaban a su materia prima tierra adánica,comparando su piedra filosofal con el barro que originó a Adán.
Los alquimistas no fueron pues magos,sino investigadores empeñados en dominar la naturaleza,sin esperar milagros.La alquimia fue para ellos explicación racional de las metamorfosis de la materia,filosofía por tanto.Aunque hubo quienes les reprocharon que no se basaran en la Kabbala y Alta Magia para lograr sus intentos,como hizo Georges Ripley,canónigo de Bridlington,condado de Yorkshire,en su Liber duodecim portarum (Libro de las doce puertas).Llegando el sacerdote veneciano Johannes-Antonius Pantheus a inventar la voarchadumia,en su Voarchadumia contra alchimiam (Voarchadumia contra alquimia),entendiendo por voarchadumia ciencia cabalística de los metales,de voarch,que significa oro,y mea a adumont (oro fabricado de dos cosas rojas).La voarchadumia fue así alquimia con implicaciones metafísicas,buscando en la alquimia las leyes de la materia,la razón de ser de la creación,la trascendencia de cuerpo y alma.La voarchadumia fue aceptada después por los rosacruces,que intentaron nada menos que fabricar con ella a Élie Artiste,especie de Mesías que salvaría al mundo por medios alquímicos.
La alquimia fue tan aceptada en la Europa de estos siglos,que William Salmon,en su Dictionaire hermétique –1645- (Diccionario hermético),define la filosofía como “arte que enseña a hacer la piedra filosofal”.Y efectivamente los alquimistas se consideraron filósofos,que intentaron la Gran Obra (hallazgo de la piedra filosofal).A los alquimistas se les llamó por tanto filósofos,y a sus ayudantes y discípulos hijos de la ciencia.
El alquimista usaba como utensilios 1)el athanor,un horno especial con fuego continuo;2)el huevo filosófico (vaso ovoide de vidrio,capaz de soportar el fuego,con un cuello estrecho),y 3)la escudilla,provista de cenizas de leña de encina.Además de lámpara de aceite,un gancho,dos balanzas con juegos de pesas,matraces y retortas,aludeles y pelícanos,vasos sublimatorios,zulaques (pastas a base de clara de huevo o almidón,para untar los vasos que exponían al fuego),y recipientes de vidrio pulido y esmerilado.
El punto de partida de la Gran Obra era la fabricación de la materia prima a colocar en el huevo filosófico.Materia prima que solían llamar azoth,y que formaban con el mercurio de los filósofos (buscado a partir del arsénico,antimonio,salitre,vitrilo y orina) y el azufre untuoso.En operaciones que llamaban magisterios,y que eran cinco:1)el de los polvos (reducir un cuerpo a polvo),2)el de la consistencia (espesar o coagular),3)el de los pesos (aumentar el peso,sin aumentar el volumen),4)el de la cualidad (hacer un bálsamo de un veneno),y 5)el de los principios (descomponer una substancia para analizarla).
La Gran Obra consistía por tanto en fabricar la piedra pulvurulenta que convertiría los metales imperfectos en oro,y que aseguraba salud y larga vida si se absorbía un poco de ella dos veces al año.Se distinguía por tanto entre la piedra de los filósofos y la piedra filosofal,y la Gran Obra dependía de tres fuegos:el natural (temperatura),el contranatural (líquidos corrosivos),y el no natural (medios artificiales).Este último debía ser continuo,una veces suave,proveniente de estiércol,o de agua calentada;otras violento,proveniente de limaduras de hierro,o de fuego algir:el vaso cubierto por el carbón ardiendo,o envuelto completamente por la llama.
Usaban diversas aguas,como 1)de cerebro,aceite de tártaro;2)de lirio,agua de oropimente;3)de los microcosmos,espíritu de nitro,o 4)de los dos hermanos extraída de la hermana,sal amoniacal extraída de orina.
Al cabo de un mes filosófico (40 días) el compuesto debía llegar al negro de la putrefacción,llamado rebis,que terminaba en piedra citrina (reducida a polvo),formando el elixir perfecto al blanco,capaz de transformar teóricamente el plomo en plata,y de curar “todas las enfermedades de las mujeres”.Un esfuerzo más,mediante el que intentaban conseguir ya la piedra filosofal,o elixir perfecto al rojo (oro potable);que multiplicaban mediante mercurio hermético crudo.
Logrado ese elixir,blanco o rojo,es cuando realizaban la proyección,añadiéndolo a un metal en fusión:fundían plomo o estaño,le añadían algo de polvo de proyección,y lo dejaban enfriar;separaban después las impurezas,y el resto es lo que teóricamente tenía que haberse transformado en oro,aunque la historia dice que no lo consiguieron jamás.Pero parece ser que algunos alquimistas eran también magos,y mediante trucos hacían ver a terceros que el resto de la proyección era oro.Estos trucos han sido desvelados por Otto Tackenius (Hippocrates chemicus,1666),Nicolas Lémey (Cours de Chemie,1675),y Geoffroy el Mayor,en un informe a la Academia de las Ciencias de París,en 1722.Y los trucos eran 1)un crisol con una película de oro recubierta con una pasta que simulaba el fondo,2)blanqueando el oro con azogue,que hacían pasar por estaño,3)encerrando granallas de oro (o plata) en plomo,o 4)removiendo la proyección con un palo de madera cuyo extremo,horadado y habilmente tapado con serrín,contenía limallas de oro.
La alquimia efectivamente logró y descubrió substancias y compuestos muy útiles en química,como el agua regia,el oropimente,el bórax,el álcali volátil,el bismuto,el antimonio metálico,el rejalgar,el sublimado corrosivo,o la copelación de la plata y el oro (su purificación mediante plomo).Los términos amalgama y cosmético provienen también de la alquimia,e incluso el fósforo y las gemas artificiales tienen orígenes en la alquimia;más tarde,perfeccionando métodos alquimistas,se obtendrían diversos procesos químicos aplicables a la industria,se perfeccionaron tintes y se confeccionaron colores.
La mala fama de la alquimia procede a veces de leyendas que inventaron algunos alquimistas,o de creencias populares.Si un clérigo se interesaba por la alquimia decían que era para realizar investigaciones prohibidas por la Iglesia.Por eso se ha atribuido a Ramon Llull la fabricación de monedas de oro llamadas nobles de la rosa.Generalmente se admite que san Alberto Magno fue alquimista,pero algunos dudan de que escribiera De alquimia.Esta manía por ver orígenes religiosos en la alquimia llevó a redactar anónimos como el Diálogo de la profetisa María y Aarón sobre el magisterio de Hermes,en el que la hermana de Moisés aparece como preceptora de la Gran Obra,cuando esa María fue la Madora de los alquimistas árabes,a la que Saturno enseñó la alquimia,mientras los alquimistas europeos tuvieron tal veneración por la María bíblica,que llamaron a su cocción baño-María.
El héroe más popular de la leyenda alquimista fue Nicolas Flamel,librero y burgués parisino,al que se adjudicó una gran fortuna fabricada con la piedra filosofal,por conocimientos adquiridos en un supuesto libro escrito por Abraham Judío,e interpretado especialmente para él por el médico Canches,al regreso de una peregrinación a Santiago de Compostela.En realidad se enriqueció ahorrando lo que adquiría vendiendo y escribiendo libros,así como con inversiones inmobiliarias,además del gran patrimonio que aportó su esposa Pernelle,viuda dos veces.Por supuesto fue versado en alquimia,aunque no escribiera las obras de alquimia que se le atribuyen:Le Désir désiré,La musique chymique de Flamel,Sommaire philosophique,Le livre des Figures hiéroglyphiques,etc.
También fue héroe alquimista Basileus Valentinus,médico alemán y alquimista,al que se presenta como monje nacido en Maguncia (1394),que llegó a superior del convento benedictino de Erfurt.Se editaron cinco tratados como suyos,aparecidos cuando un rayo partió una columna de la iglesia de Erfurt,(De la gran piedra de los antiguos (1599),De las cosas naturales y sobrenaturales (1603),De la filosofía oculta (1603),El Carro triunfal del antimonio (1604),El microcosmos (1608),y resulta que ni siquiera hubo en Erfurt
Convento de benedictinos.
La literatura alquímica es de gran belleza,impregnada de simbolismo erótico,con abundante profusión de metáforas:el lobo gris (el antimonio),la sangre del dragón (tintura de antimonio),la doncella del gran secreto (la piedra del blanco perfecto),los hermanos lisiados (metales imperfectos),las sombras cimmerianas (vapores que salen de la putrefacción),vestir camisa azulada (hacer la proyección).
Tercer héroe de la alquimia puede ser Michael Maier (1568-1622),médico alemán nacido en Rendsburg,autor de Arcana arcanissimum (El secreto de los secretos),interpretación de misterios egipcios y griegos,y 16 libros más,de los que el más famoso es Atalanta fugiens (Atalanta fugitiva,1617),que revela las manipulaciones de la alquimia a través de cincuenta grabados,cincuenta fugas a tres voces,poemas y discursos.Defendió a los rosacruces en Silentium post clamorem (Silencio después del clamor,1617).
Muy conocido es también Valentín Andreae (1586-1654),religioso protestante alemán,primer Imperator de la Rosacruz alemana,cuya mejor obra es una novela alegórica,Chymische Hochzeist:Christiani Rosencreutz anno 1459 (Las bodas químicas de Christian Rozencreutz,1459),en la que cuenta cómo encontró la piedra filosofal el legendario fundador de la Rosacruz.
El siglo XIX restableció la tradición de la alquimia,y en pleno romanticismo el químico Cyliani publicó Hermès dévoilé (1832),y Luis Cambriel el Cours de philosophie hermétique (1843).A finales de siglo François Jollivet-Castelot quiso aplicar a la alquimia los métodos del positivismo científico y el espíritu del ocultismo,siendo su discípulo más famoso Augusto Strindberg,dramaturgo sueco.
El alquimista más famoso del siglo XX ha sido Fulcanelli,autor de El misterio de las catedrales (1926),y Las moradas filosofales (1932).Erudito y filólogo,yo no lo considero alquimista,y sus libros son mera erudición.
C.G. Jung,psicoanalista,autor de Psychologie und Alchemie (1944),explicó algunos sueños como influencias de alquimia y mandala,círculo ritual del lamaísmo;su Die Psychologie der Übertragung (Psicología de la transferencia,1946) es un comentario alquímico de la líbido,y en su Symbolik des Geistes (Simbólica del espíritu,1948) compara la piedra filosofal con una representación de Cristo.

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