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rgjimenez

La magia celeste (I)

De occulta philosophia
VIII.- La magia celeste (I)

Yo,que tanto critico el empleo de las matemáticas cuando se intenta comprender el universo,me encuentro con que este primer capítulo sobre magia celeste del libro que estoy comentando comienza así:“las ciencias matemáticas son tan necesarias para la Magia,y se relacionan tanto con ella,que quienes se dedican a ésta sin emplear aquéllas no realizan nada de valor,pierden su tiempo y jamás llegan al fin de sus designios”.No me convence la física teórica,no he aceptado nada de lo que sobre magia natural ha dicho el ilustre E.C. Agripppa,y ahora veremos lo que me convence su magia celeste.
Me veo obligado a seguir citándole:“solamente a través de las ciencias matemáticas se puede producir operaciones semejantes a las naturales”.De acuerdo,pero porque de esta forma ni la física teórica ni la magia consiguen verdad alguna,sino una naturaleza inventada.De ahí que el autor continúe diciendo que las operaciones naturales no participan de la verdad ni de la divinidad.
Vuelven a carecer de importancia todas sus citas a Platón,Aristóteles y Homero,y su veracidad vuelve a manifestarse en su creencia de que “en la historia se observa que las estatuas de Mercurio hablaban,y que la paloma de madera de Arquito volaba”.Identificar leyenda y mito con la historia es,efectivamente,lo que posibilita las creencias religiosas.
Que los espejos reflejen imágenes no quiere decir que en el que Pompeyo llevó a Roma desde Oriente se vieran tropas armadas,y los que el autor confeccionaba reflejarían lugares si los tenían delante.Los magos realizan cosas que asombran,también a mí,se dice que por trucos que conocen,y no por Filosofía,Matemáticas,Música,Geometría,Optica y Astronomía.Las columnas de Hércules,y pirámide de Julio César en Roma,son obras artísticas,y no hay vestigios de ninguna de las maravillas históricas que el autor cita.Desde luego no fueron producto de espíritus,a no ser que entendamos por tales las fantasías de todos los autores “sagrados”,y de muchos “históricos”.
A través de obras abstractas y de matemáticas no adquirimos virtudes celestes,ni siquiera admitiendo que el movimiento,la vida,los sentidos,el discurso,los presagios y la adivinación lo sean.La cabeza de bronce hablaba con voz masculina sólo en la invención de Guillermo de París,y los pitagóricos tampoco acertaron si es que dijeron que “las cosas matemáticas son más formales que las físicas”:dependen menos en su esencia,pero precisamente por ello son menos reales.
No todo lo creado está formado en los números (Severino Boecio),y afirmar eso con base en el Creador es basarlo en la ignorancia.Los números no tienen ninguna virtud,pues son tan entidades abstractas como el tiempo.No están mezclados con nada,y menos con espíritus divinos.Lo creado (estrellas y cuanto orbita a su alrededor) no subsiste a través de números,y que el tiempo,el movimiento y la acción,los conciertos y las voces,estén compuestos por números avanza mi prístina sospecha que de este autor no voy a adquirir verdad alguna.Pitágoras pudo decir que todo lo que existe está compuesto de números,pero lo que yo busco es veracidad en lo que se dice.Proclo pudo decir que “el número subsiste siempre,se halla en todo,uno en la voz,otro en sus proporciones,uno en el alma y la razón,otro en las cosas divinas”,pero Pitágoras y Proclo serán maestros de magos y físicos teóricos,no míos.Themistio,Boecio y Averroes pudieron decir que sin matemáticas no se puede ser filósofo,pero matemáticas es ciencia contable,y filosofía literatura opinable.Si a través de números se descubre y comprende todo lo cognoscible,y se adquiere don profético,poco conoceremos y adivinaremos del futuro.
Cita después el autor a doce doctores católicos,pero que vieran virtudes en los números vuelve a demostrar la veracidad del catolicismo.Verdad que vuelve ser mentira cuando el autor dice que en la hierba pentaphillon,llamada cincoenrama,se observan las virtudes de los números;pues por la virtud del quinario resiste a los venenos,espanta los demonios,contribuye a la expiación,curando distintas fiebres según el número de hojas que se ingieran.Si el número siete cura lamparones o ayuda en los partos será por fe,no por ciencia.
No se pueden realizar operaciones maravillosas ni conocer cosas admirables cuando se unan los números naturales con los divinos,porque los naturales son inventos humanos y los divinos no existen.Los números simples no significan pues cosas divinas,los denarios celestes,los centenarios terrestres,los milenarios futuras.Las partes del espíritu no están juntas según su medio aritmético,ni los cuerpos están compuestos según el medio geométrico;y los animales tampoco están compuestos según armonías.

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